martes, 5 de octubre de 2010

MARÍA PAULA ALZUGARAY (ROSARIO,1974)

 
 
es mi cuerpo

soma huésped, ignorancia de mí
primer objeto de conocimiento,¿manito de ustedes?
reser de un animal donante,
gana y recipiente, obediencia y ofertorio
capricho perecedero, producto culinario,
paquete, fogón, rebaño, motor, sanatorio,
obrero del espíritu, inquietud del gustar

cara de mi enunciado desnudo

cachorro eterno, corsé del lomo y mi energía
que acalora la dermis para el enamoro y su fuerza.

sólo la forma del alma lo embellece
esa es su oportunidad, su triunfo -para adentro,
me digo-.
   
Lugar oportuno, nido del tiempo
casa presente del arreo
maleta de mí, playa de mí, gruta
desaguadero, manantial
ahíta pulpa de entierros – para adentro…-

¿Por qué tumoriza esta carne?, si va buscando
convidarse como pan orbital, pan curativo
hasta el último poro,t ajo
última borra.


Des consuelo

Desesperada noche que no existe.
Grano de anís.
Lo negro siente nostalgia del tordo.

Loa mía
toda antorcha
en la oscuridad de Coronda.

Compañías

Al verano de dos mil siete
una noche se le apagó la luz
entonces salimos al patio
a contar cometas.

Al rato, acostados en el pasto
chiquititos y flotantes los astros
nos encendían.

Retrato de familia con jardín

El padre al centro,
pero al centro no hay nadie.

Nadie tampoco en las orillas.

Sólo un perro desdibujado por el hambre
oculta bajo una mata de ortigas
el cráneo de algún pariente no muy próximo
como provisión.
Fiesta simple

Amparando a la bestia caliente
de la siesta
un cuerpo flaquito de cabello cardado
sale a buscar un astro aborigen (o zapallo)
lo hierve y revuelve.

A toda prisa, por la mesa central
enero llega naranja
con pulseras de semillas escogidas y su dulce.

Es un idea de fiesta simple que tiene en Coronda

se animan a la plenitud,
les diría.

Alevosía

Atravesados
por el deseo bestial
                               de lo que falta
pasamos años
esperando momentos

hechizados en la carencia
como lugar de la creación

camino a ser humanos

… y esto cabe en una frase.


Demanda

¡Había puertas por mecerse!
¡Celestes veranos por atrapar!
¡La naturaleza y su regalo:
Lluvia  desplomándose sobre las hojas del banano!



 de Lo albergado,Edición del autor, Rosario, 2008

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